martes, 7 de septiembre de 2010

Quincena Musical

El día 18 de agosto, repetimos cita en Donostia esta vez para ver a la Orquesta Filarmonica de Liverpool dirigida por Vasily Petrenko. Las obras que se interpretaron fueron:
El concierto para piano y orquesta nº 1 de Chopin, cuya solista fue Sa Chen y La cuarta sinfonía de Mahler.
Salimos bastante pronto, porque imaginamos que habría bastante tráfico y problemas para aparcar, llegamos a San Sebastián sin problemas pero el calvario empezó para intentar localizar un aparcamiento. Al final decidimos probar en el parking del kursaal y allí estuvimos esperando unos 20 minutos de cola para poder entrar. Justo cuando ya sólo quedaba un coche para entrar unos desgraciados, porque no tienen otro nombre, pasaron por la izquierda a todos los que nos encontrabamos allí y dieron el intermitente para pasar delante mío. Baje la ventanilla y les indiqué que tendrían que esperar y me acerqué al coche que me precedía, pero los idiotas del otro auto metieron el morro, casi dándome al coche. Muchos de los que estaban esperando, empezaron a pitarle, mientras la gente que estaba mirando su maniobra les empezó a increpar. Mi pareja se bajó del coche y les dijo a los niñatos, porque eran unos niñatos en un gran BMW, que ya les valía y que eran unos jetas, pero simplemente se rieron y otra mujer vino desde otro coche y les nos dijo que por qué les habiamos dejado pasar. Le dije que no es que les habíamos dejado pasar, sino que casi me llevan por delante. Nos comentó que a punto habían estado de atropellar a una mujer un poco más arriba. En ese momento saqué el movil y les hice una foto, ellos lo vieron, y dieron marcha atras y empezaron a acelerar como unos energúmenos. Por si alguien ve un BMW azul con matrícula 1069GJF, pues sabed que son ellos. El modelo, pues no controlo tanto como para saberlo.
Tras esta pequeña odisea pudimos aparcar y tomar un algo antes de entrar al Kursaal. La verdad que el lugar me pareció un tanto pequeño, bonito y con buen sonido pero comparado con el Euskalduna, pues no hay color.
Y pasamos a lo verdaderamente importante, que fue el concierto en sí. Simplemente uno de los mejores que he visto, con la orquesta impecable y en la primera parte con la solista china también impecable. El concierto de Chopin lo habíamos oído en directo con Perianes al piano, y yo creo que Sa Chen estuvo incluso mejor. La verdad que increible.
En la segunda parte pudimos disfrutar de la Cuarta Sinfonía de Mahler, cada vez me van quedando menos para poder oír en directo todas las sinfonías del autor, y como pasó con la primera, parte la interpretación perfecta. Me encantó el último movimiento, donde la soprano Simona Saturova tomaba papel protagonista. Mahler es un autor que cada vez me parece más interesante, y este año según recuerdo, con la BOS podremos disfrutar de otras dos sinfonías del compositor.
Al acabar la obra, parece que muchos de los asistentes tenían una prisa tremenda porque empezó bastante gente a levantarse antes de que el director Petrenko pudiera salir a recibir los merecidos aplausos. Luego la gente mayor critica a la juventud, pero en este caso, los que más "prisa" tenían no eran precisamente jovencitos. Casi se me olvida, pero como nos pasa mucha veces, nos sentamos en el centro de una cuadrillita de pesados, que si saco un caramelo de esos que hacen un buen ruido, de si tengo que andar comentando todo como si fuera un partido de basket o de qué se yo. Me marcó bastante un comentario realizado nada más empezar el concierto de Chopin, "que sonido tiene el piano", pues sí, el piano tiene un sonido que suena a piano, y es que el comentario fue hecho cuando habían sonado 3 notas.

No hay comentarios: